El viento levanta las faldas de la fina arena, que golpea con virulencia rostros, vehículo y enseres. Una tormenta más, piensan sin decirse nada los miembros del grupo. Incómoda e irritante, la situación no deja de ser, paradójicamente, bella. Como el Chad. Un país que juguetea con lo inmenso, lo salvaje y la esencia de la naturaleza. Rift Valley estuvo en enero allí, de la mano de los compañeros de Kumakonda, una aventura al alimón en mayúsculas.
Alonso, “alma mater” de la expedición comenta que “ ha sido brutal. El grupo genial y hemos vivido experiencias únicas. Que si una boda nómada, acampadas en verdaderos paraísos, tormentas de arena…”.

Ocho pasajeros a bordo de un camión 4 x 4, más un cocinero, un guía local, Alonso conduciendo el artefacto y Óscar, mecánico y manitas a partes iguales.
Tan peculiar caravana recorrió en 20 días 3.450 kilómetros, de los que apenas 960 fueron asfalto. El resto…”pistas de arena batida, dunas y pedregales varios”, comenta todavía desde la capital Ndjamena Alonso.
Se tradujo, entre otras cosas, en tres neumáticos reventados y un paso por el taller obligatorio al finalizar la ruta.

Una peripecia en uno de los países más desconocidos de África. Visitaron Ennedi (Patrimonio de la Humanidad) y algunas de las regiones más inhóspitas del planeta, como los lagos Ouinianga, Mourdi o Abeche.
Chad, que limita con Libia, Sudán, República Centroafricana, Camerún, Nigeria y Níger, da para esto y mucho más.
Anécdotas, miles. “ Un día encontramos un camión tirado por el camino. Óscar le ayudó porque tenía problemas eléctricos y continuamos. Cosas de la vida, volvimos a encontrarnos en las dunas. Fueron ellos los que nos ayudaron y enseñaron a pasarlas. Ya ves, la magia del desierto”, rememora con cariño Alonso.

“El grupo era supermajo. Todavía nos acordamos cuando, tras 9 días sin bañarnos nos encontramos con los lagos de agua dulce. ¡Fue como ver el paraíso!”, continúa.
Como colofón grupos de nómadas con sus camellos o una simpática boda el penúltimo día de viaje. “Había de todo. Bailes, carreras de caballos, lanzas y espadas…¡buah!, espectacular”, se sincera Alonso.

La aventura no queda aquí, tenemos dos rutas programadas Ennedi y Lagos Ounianga, y Gerewol y Ennedi.

Si quieres más información puedes pasar por nuestra nueva oficina en Madrid (Gabinete de Historia Natural, calle de la Victoria, 9. Primera Planta. Metro Sol). Donde nuestro compañero Tomás (tomas@rift-valley.com) te explicará todos los detalles. ¿Te lo vas a perder?
Chad, la aventura del desierto te espera.
FOTOS: ALONSO
TEXTO: RAFA MARTÍN
Dejar un comentario