África no es un país. Obvio. África es una amalgama de etnias, paisajes, culturas y fauna único en el mundo. Y mucho más. Nosotros hemos querido estrenar el blog de Rift Valley Expeditions con lo que sería nuestra particular lista de viajes imprescindible. Parcial, discutible y con matices, seguro. Hemos querido aunar aquí todo lo que nos apasiona y fascina y que, con tanto mimo queremos ofrecer en nuestros viajes.

1. ETIOPÍA.
El país, quizás, más y menos africano. El único no colonizado en el continente ofrece un norte histórico-cultural y religioso (con las iglesias de Lalibela, los castillos de Gondar o los templos del lago Tana en Bahar Dar), un sur étnico único (con tribus como Mursi, Dizi, Konso, Dorze o Hamer), montañas en las Simien Mountains o las Bale, un desierto de película (Danakil), el volcán en activo de Erta Ale y una ciudad, Harar, a medio camino entre África y Oriente.

2. UGANDA.
La “Perla de África”, según fue bautizada por Winston Churchill. Otro de los destinos imprescindibles. Uno de los lugares ideales para avisar el gorila de montaña, pero también otras especies como el león, el elefante o el chimpancé, por citar algunos ejemplos. Parques nacionales bien organizados, posibilidad de estar con tribus en el norte y escenario de interesantes deportes de aventura en el río Nilo Blanco.
3. GABÓN.
El Último Edén africano. Pura naturaleza salvaje. Un país abierto al turismo relativamente reciente y un jardín, en forma de parques naturales, donde podemos ver, dependiendo de las condiciones, elefantes, tortugas laúd o chimpancés.
4. CAMERÚN.
Otra de las grandes apuestas de Rift Valley para este año. Una África en miniatura. Diversidad de paisajes (selva, costa, montañas…), riqueza antropológica sintetizada en los pigmeos, trekkings especiales en el Monte Camerún y contacto directo con los chimpancés en la reserva de Pongo-Songo.
5. BENIN.
Un país del tamaño de Portugal. Un buen lugar para introducirse en los viajes por el continente. Con una riqueza étnica en el norte con poblados Somba, Tankeka o Borgu; y el mejor país para avistar el culto del Vudú, la religión animista más compleja de África.

6. MADAGASCAR.
Para los que piden nuevas experiencias. La cuarta isla más grande del mundo parece ideada para los amantes de la biodiversidad. Paisaje y climas variados con etnias de origen africano y asiático, fauna y flora endémica como los lémures.

Un lista que podríamos completarla con otros destinos fascinantes como Angola, Senegal, Namibia, Kenia, República Democrática del Congo, Tanzania, Sudán o Mozambique. Todo ellos, a buen seguro, formarán parte de nuestra particular maleta para el año que acabamos de estrenar.
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